El hijo del notario y la campesina..

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martes, 17 de mayo de 2011

ES HORA DE DECANTAR... EL 15% TIENE LA PALABRA !

Esos mismo medios, que hablan de libertad de expresión, son los que atropellan diariamente la libertad de información objetiva y veraz, que corresponde con una verdadera democracia. Pero no, el Perú... principalmente Lima, sigue siendo un nido de ratas y oportunistas que ofrecen líneas editoriales y conciencias, a quiénes les garantizen el status social, económico y político.

Mario Vargas Llosa y Jaime Bayly, dos carreras intelectuales opuestas, son una muestra evidente esta vez, de que no importa ´quién´ sino ´qué´ se dice, y si lo que dice favorece a nuestros intereses. Este caso es sólo una muestra, hay muchos más vergonzosos ejemplos de lo que algunos están dispuestos a hacer por mantener las cosas como están.

Es así que para mi, ha llegado el momento de tomar una decisión.

El Perú está claramente dividido, eso no es novedad. En cada esquina, en los taxis, en los programas de TV, en los diarios y casi en cualquier lugar, uno puede comprobar que esa ´enemistad´ histórica y genética, de nuestras etnias e ideologías, es por ahora irreconciliable.

El tema económico, ha sido para muchos el punto de quiebre que los ha llevado a inclinarse por la candidata, yo mismo estuve a punto de hacerlo. Pero hay otro tema fundamental, la EDUCACIÓN.

Es gracioso y a veces irritante que algunos la consideren como parte de un paquete social, no!, la educación es la inversión más valiosa y en el tiempo productiva, que puede generar un país. Es increíble que nuestros necios y estúpidos gobernantes, además de muchos ciudadanos urbanos, no se hayan dado cuenta hasta hoy. Pero incluso este tema, cuando Humala habló de cambiar la ley de Carrera Pública Magisterial, fué casi definitorio para que me incline por Keiko Fujimori... esperé unos días más.

Esos días han sido claves. La prensa, los políticos y los ciudadanos urbanos, miden con varas distintas a ambos candidatos, unos por temor, otros por conveniencia. Han elegido y han decidido que su elección hay que imponerla, a como dé lugar. En el interín han sucedido algunas cosas, el candidato temido, el chavista, ha sido comprometido con la estabilidad democrática. Eso me da cierta tranquilidad y seguridad, para enfrentar su hipotético gobierno ahora, no dentro de 5 años.

Por el otro lado está Keiko Fujimori, la que dicen que no necesariamente es ´hija de su padre´, cómo tampoco fué ´hija de su madre´ cuando ésta fué torturada por orden del mismísimo Alberto Fujimori. Que linda familia verdad?. El cinismo de Keiko y sus reveladores gestos adustos, debería intimidar tanto como su oponente, pero un momentito... ella nos garantiza que el Perú, así como está, está bien.

Yo digo que no! y el precio a pagar se llama Ollanta Humala, por mi parte voy a darle otra patada en el trasero a los representantes del voto inteligente, a los del voto conveniente, a los del voto impositivo, a los del voto que cuenta... al voto tradicional, al voto intolerante, al voto en contra con mi propio voto en contra. En contra de Keiko Fujimori, en contra de quiénes quieren que el crecimiento económico vaya de la mano con sus intereses, antes que con los del Perú.

A mi me parecía una teoría maquiavélica, esa que dice que al pueblo hay que mantenerlo ignorante, porque así trabajan más y joden menos... ya no me parece tan descabellado.

Las encuestas son claras, el miedo ha calado hondo y el miedo no ve más allá de los próximos 5 años. El miedo no permite ver que Keiko garantiza el crecimiento sí!, pero también la necedad del corto plazo, del asistencialismo inútil que haría del Perú una olla de presión que podría explotar 5 años más tarde o 5 años después de los siguientes 5 años, y siempre habrá un Ollanta... y otro... y otro.

Pero las encuestas muestran otra cosa más, un sólido y convencido VOTO VICIADO Y EN BLANCO, un 15% que puede demostrar que los peruanos no somos tan gallinas como el resto de latinoamérica afirma. Si! tal vez es hora de decantar... en contra de lo que nos quieren imponer, en contra de KEIKO FUJIMORI.